Lunes, 24 de mayo, 1982.
En las Malvinas, los ingleses y los argentinos
se matan cada vez más salvajemente, según la radio.
Miércoles, 26 de mayo, 1982.
No voy a ocuparme aquí de las Malvinas, pues,
como muy bien lo dice la Biblia en alguna parte, cada cosa tiene su tiempo y su
lugar; me limito a preguntarme si tantos ingleses en la autopista no será una
manera perfectamente británica de que muchos de llos le estén haciendo un corte
de mangas a Maggie Thatcher y cambiando los pingüinos de Port Stanley por la
ruleta de Montecarlo.
Sábado, 29 de mayo, 1982.
Cuando usted lea esta página, las noticias de
esta tarde serán ya un mero gajito en la inmensa naranja del tiempo, cosas y
cosas habrán sucedido y, como cantaba Jean Sablon en los viejos tiempos,
Tout passe,
tout casse, tout lasse,
Un autre aura ma place…
Otra guerra arderá en otros horizontes,
etcétera. Pero hoy es ésta y es nuestra, es América Latina. ¿cómo no llenarse
de angustia ante la siniestra pantonima de una junta militar que, sabiéndose
rechazada por la población civil, opta por una fuga hacia delante y se lanza a
la reconquista de la Malvinas, sabiendo perfectamente que eso manda a la muerte
a millares de conscriptos mal entrenados y equipados? ¿cómo no sentir náuseas
frente a la estupida adhesión de una mayoría de argentinos que en estos últimos
años han vivido día tras día la opresión, los asesinatos, la tortura y la
desaparición de millares de compatriotas?
Martes, 1 de junio, 1982.
¿Creen que es fácil avanzar por esta maldita
autopista cuando uno no tiene coche? ¿Y en estos días, nosotros argentinos y
los autos casi todos de su Majesty?
Jueves, 17 de junio, 1982
Anoche, después de las tristezas finales de la
estupida guerra de las Malvinas, France Inter nos regaló un programa que jamás un
expdicionario de veras hubiera podido pasar por alto. Un equipo tan científico
como el nuestro transmitiá desde Escocia y a orillas del Lago Ness un detallado
informe sobre Nessy.
Viernes, 18 de junio, 1982
Tengo también una entera casette con la voz de
Eladia Blázquez cantando sus canciones, que en estos días, al final de esta imbécil
y siniestra guerra de La Malvinas, parecen todavía más verdaderas: Somos como
somos, Patente de piola, Vamos en montón…
“Los autonautas de la cosmopista” Julio Cortázar y Carol Dunlop.
Al respecto, por contraste, Carta a El País, 20 abril, 1982:
ResponderEliminar"Leo en EL PAIS que la Comisión Argentina de Derechos Humanos hace una declaración con respecto al problema candente de las Malvinas, y encabeza firmando dicha declaración Julio Cortázar.No voy a prentender suscitar una polémica con el señor Cortázar, pero sí, como argentino, sugerirle que hay muchas formas de criticar un Gobierno, de combatir un sistema o de díscrepar de una situación política, pero creo que este no es el caso del escritor que firma en nombre de la comisión.
En primer lugar, porque el señor Cortázar creo que ya no es argentino, puesto que, según la Prensa, decidió cambiar la blanca y azul por la tricolor, y todo el mundo sabe de su condición de francés.
Por otra parte, el señor Cortázar hace infinidad de años que vive en Francia, más de la mitad de su vida, y por supuesto ya tiene una mentalidad diferente a la del pueblo argentino, que, sea quien sea el que ocupe la Casa Rosada, se ha volcado en la plaza de Mayo para festejar la reivindicación de las Malvinas. El señor Cortázar debe comprender o intentar coniprender a sus ex conciudadanos, aunque sea desde su prisma actual de nacionalizado francés".
ALBERTO DONPE
http://elpais.com/diario/1982/04/20/opinion/388101613_850215.html